CAPITÁN MORO 2.015: 2015

domingo, 27 de septiembre de 2015

viernes, 21 de agosto de 2015

Buena nota para Moros Tuareg en su primera Capitanía

Fotos: Salva González

11 de agosto de 2015

Moros Tuarge asumía el gran reto de ejercer su primera Capitanía Mora y lo ha hecho con buena nota a tenor del boato que la comparsa ha desplegado por las calles de Elche para arropar a su capitán, Diego Maciá.

Acercar algunas de las costumbres, cultura y el día a día de un pueblo bereber en un oasis del Sáhara era la temática elegida por la comparsa para este boato. Y como buen oasis que se precie, las palmeras han tenido un protagonismo especial con multitud de ellas desplegadas a lo largo y ancho del desfile. Como multitudinaria ha sido la presencia de ese animal sin el que no se entiende el desarrollo de la cultura bereber en el desierto: el dromedario.

La primera parte del desfile ha estado dedicada a la importancia dentro de esa cultura matriarcal de la mujer tuareg. El desfile de varias filàs especiales conformadas por mujeres ha puesto en relieve ese hecho. También los niños, al cuidado de las féminas, han tenido su parte destacada, a través de un ballet que ha hecho las delicias de los espectadores. Cerraba esta primera parte del desfile la carroza de la Tárguia Tuareg, cargo representado este año por Manoli Martínez, esposa del capitán moro, y que representaba una jaima desde la cual administraba el campamento durante las prolongadas ausencias de los hombres.

Nuevos estandartes abrían la segunda parte del boato, que destacaba la labor de los hombres tuareg; pastores y guerreros a partes iguales, pero, sobre todo, nómadas. Sus trabajos, su vida en el desierto o su religión, representada por una carroza con forma de minarete donde el almuecín llamaba a la oración, han sido algunos de los elementos que Tuareg ha hecho preceder a la carroza de su capitán, Diego Maciá Rodríguez, que ha querido repartir del protagonismo de la noche con otros compañeros de comparsa, entre los que se encontraba el concejal de Fiestas, José Pérez.

Seguirían después el resto de comparsas del bando moro, que para el próximo año contará con la incorporación de Abencerrajes, constituida recientemente como comparsa y que tuvo presencia solamente en la entraeta del pasado viernes.

(NOTICIA Y FOTOS PUBLICADAS POR ELCHEDIARIO.COM)

Brillante estreno de Moros Tuareg

La comparsa arropa a Diego Maciá con un vistoso boato en la primera Capitanía

El acompañamiento giró en torno a la cultura, costumbres y usos sociales del pueblo bereber del Sáhara

GASPAR MACIÀ | ELCHE

11 agosto 2015

Había expectación por ver el estreno en la Capitanía de Moros Tuareg, y en especial el boato preparado para arropar a su máximo cargo, el capitán Diego Maciá Rodríguez. Y el espectáculo presentado ayer tarde por la comparsa estuvo a la altura de ese interés. Resultó original y fue escenificado con vistosidad por el medio millar de participantes. Todos ellos -menos los músicos- comparsistas, familiares y amigos que colaboraron para darle mayor realce. Los estandartes, escudos, adornos y demás elementos que utilizaron en el desfile también fueron confeccionados por la comparsa.

Un boato «sencillo y que no compite con nadie», pero hecho «con muchas ganas e ilusión» y con recursos propios, según destacaron desde la comparsa momentos antes de mostrarlo a un público que volvió a abarrotar el itinerario y que premió con sus aplausos a los participantes. La comparsa repartió folletos explicativos entre los espectadores para seguir mejor su desarrollo.

Embajadas más pobladas de festeros y con lluvia

Como ya sucedió con el boato del Capitán Cristiano que giró en torno a los caballeros templarios que dan nombre de la comparsa, los Moros Tuareg eligieron como tema del boato las costumbres, cultura, historia y ritos de este pueblo bereber del Sáhara.

El boato estuvo separado en dos partes, como también lo están los trabajos, labores y hechos cotidianos de los tuareg. La primera estaba dedicada a las mujeres, que tienen un papel determinante en esa sociedad nómada. Tras la carroza de la Abanderada de la Asociación, Mari Salinas, y su filá especial, llegó el escudo de la comparsa, dos escoltas en camello y el estandarte a caballo, una colla de dolçaina, banderas de las tribus, un grupo de percusión y baile y palanquines con las palmeras del oasis y los oficios femeninos. Seguía el ballet de los niños -que quedaban al cuidado de las mujeres en el oasis-, el cabo batidor y las filás especiales femeninas Yarazeth, Vickys y Al-Mohades, acompañadas por la Banda de Música de Rojales.

A continuación, tras nuevos estandartes, un cortejo femenino en tres camellos con montura doble, otra filá especial de mujeres y la carroza de la Tárguia Tuareg, que desde su jaima imparte justicia, asesora y cuida el campamento en las frecuentes ausencias de los hombres por el desierto. Un cargo que desempeña Manuela Martínez Torres, esposa del Capitán, que por este motivo no desfiló junto a su esposo. Cerraba esta primera parte la Banda Ruperto Chapí de Villena, y el batallón tuareg con filas de hombres y de mujeres, como transición a la segunda fase.

Una segunda parte del boato dedicado a los hombres nómadas del desierto y sus trabajos. El cuidado de la ganadería y la dureza de atravesar el temible Téneré para llegar a las salinas de Bilma; el retorno de la Caravana de la Sal con su preciada carga, escoltada por los jóvenes guerreros Ileyan. Finalmente el cortejo del estrato social más elevado, donde sólo los nobles Imayeghan con sus ropajes negros tienen presencia. El culto religioso por parte de los Ineslemen que asesoran al capitán, líder estratégico y religioso de las tribus tuareg que desde el Templo de Arena de D'jenne contempla sus dominios.

Todo ello escenificado, con un palanquín de niños y una jaima de oficios masculinos, y una colla de dolçaina. Seguían un rebaño de animales, dos escoltas a camello, la caravana con otros tres y otro par de guardianes de la preciada mercancía. Otro grupo de dolçaina, el cabo baitor y las filás especiales masculinas Kel-Adrar y Mercenaris, con otra banda de música.

Tras las cruces tuareg, el minarete de la oración y el imán en lo alto, con tres porteadores, y un carro con la oración. A continuación, el ballet Dromedarios y la guardia personal del capitán, con tres jinetes a caballo. Venía después el pebetero de incienso, y el camello enjaezado del capitán, que cerraba el cortejo en su carroza acompañado de su guardia (entre ellos el concejal de Fiestas, José Pérez). La banda La Amistad del Palamó (Villafranqueza) puso el punto final al boato.

A continuación desfilaron las otras comparsas moras, acompañadas por las respectivas bandas.

(NOTICIA Y FOTOS PUBLICADAS POR EL DIARIO LA VERDAD)

La esencia tuareg invade Elche

El capitán moro, Diego Maciá, deleita con una magnífica Entrada del bando de la media luna

MAR ALBEROLA/ FOTOS: SERGIO FERRÁNDEZ 11.08.2015 | 10:32

La esencia tuareg invade la ciudad ilicitana

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La esencia tuareg invade Elche

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Elche cayó ayer bajo el dominio morisco de la mano de Moros Tuareg que ofreció una magnífica Entrada mora.

El desfile inundó las calles de la ciudad de la esencia tuareg. Las costumbres, la cultura, la historia y los ritos de este pueblo nómada en el que la mujer tiene un papel determinante en una estructura matriarcal. Así, en la primera parte del boato, el público asistió a la representación de la vida en los oasis donde las esposas permanecen en los campamentos con los hijos y esperan el regreso de sus maridos. Un Consejo de mujeres es el encargado de impartir justicia a través de la figura de la Tárguia. Esta parte culminó con, precisamente, la Tárguia, cargo representado por Manoli Martínez, la mujer del capitán moro, en una carroza.

Tras ella, los hombres nómadas del desierto y sus oficios como el cuidado de la ganadería y la dureza de atravesar el Téneré para llegar a las salinas de Bilma. Y todo, escoltado por los jóvenes guerreros «Ileyan». A continuación, el estrato social más elevado, donde solo los nobles, el clérigo y los musulmanes pueden vestir de negro.

Ellos precedieron a la entrada triunfal del capitán moro, Diego Maciá, quien desfiló, acompañado en todo momento por la escuadra especial «Mastegaors», en una carroza que representaba el «Templo de Arena de D'jenne». Desde ahí, el capitán contempló sus nuevos dominios -la ciudad de Elche que acaba de conquistar- y saludó a sus nuevos vasallos.

Todo el boato estuvo aderezado por grupos de baile (incluso un grupo de niños de una comparsa deleitó al numeroso público congregado en las calles con una coreografía), palanquines (carrozas de baja altura), bandas de música, jaimas, cruces tuaregs o camellos.

Tras los festeros tuaregs desfilaron el resto de comparsas del bando de la media luna: Benimerines, Abbasies, Moros Sarracenos, Musulmanes Almorávides y las Huestes del Califa.

Austeridad

A pesar de no ser un boato «rico ni lujoso», sino más bien «austero» como señalaron desde la comparsa, los Tuaregs ofrecieron al pueblo de Elche todo un espectáculo de sonido y color en el que participaron más de 600 festeros y con el que esta joven comparsa (sólo tiene seis años de vida) se estrena con su primera capitanía.

Y para ser fiel a esa austeridad, según destacaron desde la comparsa, muchos de los elementos que ayer se exhibieron en la entrada mora, como cruces o palanquines, los confeccionaron los propios festeros.

La Entrada mora puso anoche el punto y final a los desfiles de los Moros y Cristianos de Elche 2015.

(NOTICIA Y FOTO PUBLICADA POR EL DIARIO INFORMACIÓN)

«Queremos que en la calle quede una buena sensación»

DIEGO MACIÁ RODRÍGUEZ, Capitán Moro 2015

Festero desde hace seis años, representará al bando moro y vivirá en primera persona el estreno de su comparsa en la capitanía

DAVID SEVILLA ELCHE

10 agosto 2015

Festero desde 2009, año en el que se fundó su comparsa, Moros Tuareg, Diego Maciá Rodríguez, trabajador de la banca de 51 años, realizará esta tarde su Entrada como Capitán Moro precedido de un boato «diferente, tal y como nos gusta hacer las cosas a nosotros», explica. Un recorrido en el que no estará solo, ya que, además de su familia, estará arropado por todo el bando moro. Además, su mujer, Manoli Martínez, cargo femenino de la comparsa -Targuia-, le seguirá de cerca.

-¿Cuál es su trayectoria festera?

-Llevo desde 2009 cuando se fundó la Comparsa Moros Tuareg. Somos gente que venimos de la Semana Santa. Llevamos 27 años con el Cristo de la Columna, que forma parte de la Hermandad de la Flagelación y Gloria. Hace seis años decidimos montar la comparsa e iniciar la andadura en las fiestas. Bien es cierto que mucha gente de la que forma la comparsa venía de Estudiantes, por lo que había experiencia festera. De diciembre hasta abril estamos liados con la Semana Santa y después enganchamos con Moros y Cristianos.

«Hace seis años decidimos montar la comparsa e inicié la andadura en las fiestas»

-¿Se le pasó por la cabeza hace seis años que llegaría a ser Capitán Moro?

-Cuando entramos en la comparsa nuestra idea era vivir la fiesta y pasarlo bien. En ningún momento se me pasó por la cabeza ser cargo. Hace tres años todos los que montamos la comparsa decidimos que fuese yo y aquí estamos.

-¿Le costó mucho decidirse?

-Dar el paso no me cuesta nada. Cuando llegó el momento lo asumí. Es algo que decides a tres años vista y ahora es cuando te das cuenta que lo tienes encima. El tiempo pasa muy rápido.

-Es la primera Capitanía de Moros Tuareg. ¿Hay nerviosismo?

-Es la primera que organizamos y queremos que salga todo muy bien y que sea un referente en la fiesta. Queremos que en la calle quede una buena sensación.

-¿Cómo será el boato que pondrán en marcha esta tarde?

-Va a ser un boato diferente, tal y como estamos acostumbrados a hacer las cosas en la comparsa. Yo creo que va a gustar mucho cuando se vea en la calle porque hay ciertos elementos que van a llamar mucho la atención.

-¿Cómo es el trabajo para confeccionar y llevar a cabo un boato?

-Nosotros nos lo hacemos todo. Hay un grupo de 12 personas que están trabajando desde la junta y además tengo a mi filà que colabora en todo el tema de montaje de campamento y sacar el boato a la calle. Es una implicación de todo el mundo. No es algo que sea únicamente mío. Es de toda la comparsa.

-¿Cómo lleva el acudir a tantos actos festeros durante los últimos dos meses?

-Llevo agenda de lunes a viernes y los fines de semana no me gusta llevar ningún tipo de agenda. Esto me ha trastocado todo mi panorama de esos días. Es excesivo. Entiendo que todas las comparsas quieren tener a los cargos en sus cenas, aunque creo que debería delimitarse a la cena de los Capitanes y a la de Proclamación. Ya no por el gasto en sí, aunque también es una de las causas. Lo digo por el hecho de que todos los fines de semana tienes algún evento.

-¿Qué tal fue la Cena de Capitanes? ¿Era como la imaginaba?

-La verdad, no esperaba nada. Nunca había vivido una cosa así y todo fue una sorpresa. Tanto la comida de presentación de mi comparsa como la cena de Proclamación de Capitanes son actos que te marcan. Ves como la gente se vuelca en ti y es una sensación muy gratificante.

-¿Cómo es ese otro punto de vista que le otorga representar el cargo de Capitán Moro?

-Siempre he intentado vivir todo esto desde un segundo plano. Había otros capitanes, ya que esto lo sabíamos desde hace tres años. Nuestra intención era que todo el mundo terminase su capitanía y que después se hiciese oficial. Al vivir en un segundo plano no te relacionas con la gente e intentas que no vean que tú vas a ser el futuro cargo. Es una sensación agradable, ya que ahora conozco a mucha gente que antes no conocía.

-¿Ha recibido algún consejo por parte de sus antecesores?

-Todo el mundo se pone a tu disposición para lo que quieras. Ahora es cuando comienzo a entender un poco eso de la gran familia de Moros y Cristianos.

-¿Qué imagen tenía de Moros y Cristianos antes de ingresar en Moros Tuareg?

-Tenía la sensación que ahora puede tener el 95% de la gente que vive en Elche. Creen que la fiesta de Moros y Cristianos se organiza solo para ellos. Y la gente está totalmente equivocada. Hasta que no das el paso y te incorporas a una comparsa no sabes realmente lo que hay dentro. Encuentras grandes personas. Es una forma de conocer a gente que antes no conocías y de entablar nuevos lazos de amistad. Una sensación muy agradable.

-¿Qué le diría a la gente que se muestra distante con las fiestas?

-Que intenten participar. Piensan que es algo exclusivo y caro, y no es así. Salir una familia de cuatro personas por un euro al día no es nada caro. La gente tiene esa percepción y piensan que es un coto cerrado, aunque yo he comprobado que no es así.

-¿Cómo es la relación con el Capitán Cristiano y la Abanderada?

-Muy buena. A José María Mazón, Capitán Cristiano, lo conocía porque había sido costalero en nuestro paso y tenemos relación desde hace muchos años. La que realmente me ha sorprendido es la Abanderada, Mari Salinas. Gente que no conoces en la fiesta y que después te das cuenta de que es una persona con todo positivismo, optimismo y que tiene un corazón que no le cabe en el pecho. Una persona que siempre tiene una sonrisa en la cara. H constituido realmente una sorpresa muy grata.

-¿Cómo ve el papel de la mujer dentro de la fiesta?

-Veo a la mujer totalmente integrada en la fiesta. Trabajo por la zona de Alcoy y voy a muchas fiestas de Moros y Cristianos. Allí el tema es un coto cerrado para la mujer. No acabo de entender que en pleno siglo XXI estemos en una situación que proviene prácticamente del feudalismo. Estoy totalmente de acuerdo con que las mujeres puedan representar cargos del mismo modo que lo hacen los hombres. Si mi mujer fuese capitana, yo estaría volcado del mismo modo que lo estoy ahora.

(NOTICIA Y FOTO PUBLICADA POR EL DIARIO LA VERDAD)